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Todo pasa y se acaba

4 Mar

Todo pasa y se acaba

Todo pasa y se acaba

 

El tiempo se asemeja a las nubes que bate el viento, algunas pasan con una lentitud que enerva y otras se van tan a prisa, que se pierden en lontananza sin haber podido observarlas detenidamente. Nos dejan la duda si eran simples, blancas y espumosas o eran oscuras, teñidas de una Gris Pizarra que apena. Algunas muestran que el tiempo será bueno y algunas veces dan la impresión de que desaparecen, pero son tan tenues que dejan que el cielo muestre su brillante color Azul Capri.

 

La vida también transcurre como las nubes, su transitar es similar, no se detiene, algunas veces pasa veloz y otras con una lentitud que pone nervioso, incluso a los más tranquilos. Generalmente cuando esperamos algo del destino, en cambio las desgracias son abrumadoras y no pasan a gran velocidad y se estacionan para lastimar.

 

En este caso a una persona se le formó un «cumulonimbus», (nubes originarias de tormentas, tornados, granizos). Después de más o menos seis años, por recomendaciones médicas la muchacha hizo un relato de relaciones pasadas, demostrando que lo dicho en un inicio era diferente. Lo cual le produjo un golpe al joven, que se le convirtió en una obsesión, por suerte logro superar eso, pero le modifico su forma de ser en forma substancial. Después de varios lustros, en otra conversación ella le confirmó lo que para él aparentaba una sospecha, además lo culpo de manías, que posiblemente eran reales, con lo cual se completó el panorama.

 

Existen algunos acontecimientos capaces de oscurecer el panorama, aunque según Gabriel Garcia Márquez, dice que la memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y gracias a ese artificio, logramos sobrellevar el pasado. También se puede decir: Añorar el pasado es correr tras el viento (proverbio ruso). El cerebro humano es tan cruel que almacena los recuerdos, que estando en el subconsciente algunas veces afloran para atormentar e inconscientemente retornan en forma de sueños, que se pueden convertir en pesadillas que algunas veces vuelven a la conciencia. Carlos Fuentes (1929-2012) Periodista y escritor mexicano decía: Cuando expulsamos al pasado por la ventana no tarda en regresar por la puerta principal, disfrazado de las más extrañas maneras. Las guerras contra la memoria son perdidas, al cabo, por quienes las emprenden.

 

¿Cómo olvidar el pasado? Si los humanos somos capaces de hacer cosas fuera de lugar, Dios nos puede ayudar a olvidar lo que nos daña y no nos trae paz. Si miramos hacia atrás, probablemente podamos ver cosas de las que nos avergonzamos y desearíamos no haberlas hecho nunca. Quizá no es lo que hicimos, sino lo que nos hicieron lo que nos deja sintiéndonos mal con nosotros mismos.

 

Es interesante acompañar el paso del tiempo, pero es importante y preferible tener la mirada dirigida al futuro, aunque este es incierto. Entre el pasado y el futuro se puede tener una mejor vivencia del presente. Es necesaria la experiencia, que se considera lo acaecido y la fe, que es la esperanza del futuro, con esos dos puntos de vista, la vida cotidiana puede tener mejor consistencia y brindarnos la felicidad que necesitamos afrontar el futuro sin arrepentimientos ni malas influencias.

 

Miguel Aramayo

SCZ.27-07-20